Al otro lado del espejo,
Con los pies de arena,
Sin dejar de caminar.
Rompiendo sueños para realizar mis planes
Y Planear,
como copiloto,
Para volar.
Uno se despide de los sueños sólo cuando llega el alba,
Uno se quita las lagañas,
Se acomoda el pelo,
Uno se cuida cada día en un renacer,
Y renacer jaguar me dio la verdadera vida.
Cerrar caminos para andar en nubes,
Con el sueño que contuve,
de Labrar senderos ha llegado,
La incertidumbre pasó,
Hoy sé que soy ser libre y soy lo suficiente fuerte,
Que he vivido y nadie podrá negarlo,
Que me he roto la madre con la vida,
Que he he besado a la muerte
Y hoy,
floto sobre el tiempo,
Saltando en los recuerdos,
Terminando acuerdos,
Concordando con la risa,
La brisa cálida de la esperanza,
Me toca el rostro en alto que se va fraguando,
En el de un hombre.
La locura acabó,
El infante despertó,
Deserto,
Al desierto de los dioses,
Hoy soy más listo y sé observar,
Hoy es hoy por hoy para ocho años,
Destruido y contento,
Cada flor en el cemento,
Ha sido la esperanza de la vida,
Por qué de las Cabañas viejas surge vida,
Sólo si las dejas morir le brotarán las plantas.
En shock pero contento,
De qué la esperanza sea cierta,
Dejar la o indecisión de la marea,
Sentar la cabeza a media tierra,
Enraizar.
Porque para un ave debe haber un árbol,
Al qué también se le puede llamar hogar,
Yo soy el árbol el jaguar las ramas,
No dejaré que ningún hachazo me sacuda.
Con los pies de arena,
Sin dejar de caminar.
Rompiendo sueños para realizar mis planes
Y Planear,
como copiloto,
Para volar.
Uno se despide de los sueños sólo cuando llega el alba,
Uno se quita las lagañas,
Se acomoda el pelo,
Uno se cuida cada día en un renacer,
Y renacer jaguar me dio la verdadera vida.
Cerrar caminos para andar en nubes,
Con el sueño que contuve,
de Labrar senderos ha llegado,
La incertidumbre pasó,
Hoy sé que soy ser libre y soy lo suficiente fuerte,
Que he vivido y nadie podrá negarlo,
Que me he roto la madre con la vida,
Que he he besado a la muerte
Y hoy,
floto sobre el tiempo,
Saltando en los recuerdos,
Terminando acuerdos,
Concordando con la risa,
La brisa cálida de la esperanza,
Me toca el rostro en alto que se va fraguando,
En el de un hombre.
La locura acabó,
El infante despertó,
Deserto,
Al desierto de los dioses,
Hoy soy más listo y sé observar,
Hoy es hoy por hoy para ocho años,
Destruido y contento,
Cada flor en el cemento,
Ha sido la esperanza de la vida,
Por qué de las Cabañas viejas surge vida,
Sólo si las dejas morir le brotarán las plantas.
En shock pero contento,
De qué la esperanza sea cierta,
Dejar la o indecisión de la marea,
Sentar la cabeza a media tierra,
Enraizar.
Porque para un ave debe haber un árbol,
Al qué también se le puede llamar hogar,
Yo soy el árbol el jaguar las ramas,
No dejaré que ningún hachazo me sacuda.