martes, 29 de agosto de 2017

petit morte






me seduces como el puerto al navegante,
como el oasis del desierto,
me miras de frente,
me abrazas,
silencio,
pausa
.



pones tus manos sobre mi espalda,
te recargas sobre mi pecho
y hay música que solo los amados escuchan.


me atrae tu justicia,
me seduces,
como encontrar el camino cuando estás perdido en el bosque,
como la soga al ahogado,
me apeteces,
como el aire al ahorcado,
me seduces,
como la vida al suicida,
me apeteces,
como el bocado del condenado,
como si el único beso tuyo,
fuera la salvación a existir.


me permites,
atravesar tu cuerpo,
desgarrarte la ropa
cruzar contigo la puerta,
mientras me quitas la carne,
me desgarras los huesos,
 me devuelves escombros,
para regresar vivo,
del orgasmo, 
a mi cuerpo,




me permites sentir,
como si el silencio,
la paz,
la tormenta,
fuera lo único que importa,

me permites vivir,
por un día,
construyendote seducciones voraces,
para poder llegar a ti.



sábado, 26 de agosto de 2017

dibujos



hemos dibujado,
 entre el desierto del tiempo,
constelaciones de agua,


tu mirada me recorre como pluma,
la algarabía de la alegría,
dibuja arpegios en mis costillas,
coloreas mantras sobre la sombra 
y la muerte en mi espalda.


incineras el pasado,
se incendia
y como cenizas,
vuelan,
ligeras al viento.


sábado, 19 de agosto de 2017



hemos recorrido el tiempo,        
en ese desierto de arena,      
encerrado en vidrio,                         
                  que gira,
para caer de nuevo.

basta un caricia para resolver el mundo,
"vamos a la cama"
y abrazarme la espalda,
como la noche a la tierra,
respira.


no necesito recorrer el mar,
como mis ojos necesitan tus piernas,
como un marco polo el río,
así necesito encontrarte.


me has enseñado de la vida y de mi,
de la conformación cotidiana de lo im-pasible,
y en ese impasse,
resulta que al final estás tu,
esperando.


let my baby stay (Cover) By Catalina Durán


martes, 8 de agosto de 2017

sin conocer la nieve



sé que puedo morir sin conocer la nieve
y no me molesta,
o ya no me molesta que es distinto.

podré no surcar el cielo como predije,
ni viajar a otro continente,
ni fotografíar un jaguar,
en su dulce selva,
podré dejar descansar a la rosa de los vientos,
y quitarle lo imantado a mi brújula,
pero sigue dando al sur.

sé que puedo,
pero hay algunas cosas que ya no quiero,
y otras que necesito más.

necesito pararme firme
y reconocer un par de atributos que me había negado,
dejar de lastimar con otros,
defectos,
atribuidos.

sé que puedo despedirme de algunas ideas,
pero no de mis ciegos ideales,
románticos,
creo que la horizontalidad es posible,
por el tiempo que pueda durar,
no creo en esa violencia prepotente,
que dejó sumisa a mi vecina,
a la que golpeaba su esposo.


pero si creo que mi puño en la boca,
del señor esposo,
fue un acto de justicia.

creo en la violencia,
como resistencia.

no creo en los que fabrican las leyes,
a su modo,
"el que hace la ley hace la trampa"

sé que puedo morir sin conocer la nieve,
pero no sin la esperanza,
de un optimista informado,
que pretende un mundito mejor,
aunque sea por un segundo,
en que el planeta se pueda detener.








no debería





retratar la violencia sin hacerle un homenaje,
con nombres,
con verdades.

no debería ser un acto poético,
no merece una flor cada bala,
enterrada en la carne,
así como no merecía la muerte esa niña de vestido rojo,
con tiro de gracia,
a la orilla de la carretera.

debería ser una acto de justicia,
pero siento,
que no puede serlo.

retratar distinto a una cámara,
porque no hay sangre en ésta tinta,
retratar al migrante,
a la madre del desaparecido,
que tenía rostro,
tenía gustos,
como tu,
como yo.

un poema no debería retratar
un silencio en la mesa,
en la sala,
en el salón de clases.


debería tener un abrazo sonriente,
no una ausencia.

un poema a la violencia no debería ser una apología del desastre,
debería doler en la carne como la misma carne,
lapidada.

como lágrima

debería ser mi amiga,
hermana,
 que no debía morir,
no así.




 me enamoré del río y de la calma, del sudor fresco que destilan mis albañiles, del café, de la fruta, de mis hijos. me enamoré de éstas roc...