sábado, 19 de agosto de 2017



hemos recorrido el tiempo,        
en ese desierto de arena,      
encerrado en vidrio,                         
                  que gira,
para caer de nuevo.

basta un caricia para resolver el mundo,
"vamos a la cama"
y abrazarme la espalda,
como la noche a la tierra,
respira.


no necesito recorrer el mar,
como mis ojos necesitan tus piernas,
como un marco polo el río,
así necesito encontrarte.


me has enseñado de la vida y de mi,
de la conformación cotidiana de lo im-pasible,
y en ese impasse,
resulta que al final estás tu,
esperando.


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