jueves, 29 de diciembre de 2016

Construyendo




he pasado nueve horas manejando,
y he visto en las líneas del horizonte tus ojos,
en cada curva tu cintura,
llevo nueve horas en ti.

he podido hablar
...
..
.


he pasado una gama cromática emocional,
me he juzgado,
fuerte,
me he enjuiciado severo
y me he descubierto,
me he desnudado de los pensamientos más honestos.
de los más ridículos,
los más vergonzosos,
los más alegres,
los más felices,
los más tristes y contradictorios,
te he visto con mis ojos
y como no querer verte con ellos,
con otros.

he visto por primera vez el futuro
si el miedo había sido construirlo,
ahora lo es pensar en derribarlo.


nueve horas en carretera,
nueve horas en ti.


he visto desdoblarse el tiempo ante mi,
un café,
un cigarro,
otro café,
taurina,
música,
líneas de tu cintura
he deconstruido el amor,
horizonte en tus ojos
y me voy reconstruyendo lento,
nueve horas.

en la ventosa sentí tu respiración en mi pecho,
tus manos frías calentando mi alma,
me vi ausente,
me vi en miedos,
en una visión ajena a ratos,
me vi existiendo,
contigo,
sin ti,
pese a ti,
pese a mi
y la peor realidad posible,
dentro de las posibles es tu ausencia.


te he visto bailando,
encendiendo un cigarro,
cuestionando,
he visto tu pecho en mis manos,
tu boca,
el orgasmo,
te he visto escribiendo un cuento,
te he visto concretar ideas,
te he visto no huir,
quedarte,
con mis inseguridades
y mis sensiblerías.


te he visto bailando
...
..
.

y me he visto bailando,
encendiendo un cigarro,
respondiendo,
he visto en mis manos tus pechos,
mi boca,
mi orgasmo,
me he visto leyéndote poema,
me has visto no como el crucigrama,

me viste huir,
no me viste voltear,
seguirte.

nueve horas
...
..
.

nueve,
cada una distinta a la otra,
me han visto compasivo,
regalando el corazón como una rosa,
y me he visto permisivo un poco.




he visto en e horizonte tus ojos
y solo me he visto nueve horas,
construyendo contigo.














martes, 27 de diciembre de 2016

todo está bien.



 sensible,

es de esos días, 
que el viento te toca,
y no puedes más que sentir 
en cada poro 
su temperatura.


he sentido el viento
y me ha hecho recordar 
que me han intentado apresar,
entre las manos,
hoy es distinto


me respiras,
me contengo adentro,
me respiras, el viento me toca
y no puedo más que sentir,
 en cada poro tu temperatura.


estabas lejos,
al otro extremo de la cama
y sentí un océano,
una galaxia.

musitaste palabras dormida
y el invierno cayó,
un nombre,
una negación,
moviste mi pierna,
una eternidad en una galaxia lejana,
en ese otro extremo de la cama,
 ahí acostado en una luna de hielo,
una luna de saturno,
te vi,
 pasar,
pedí un deseo fugaz.


creo que el universo es benévolo,
he pensado que eres un sueño,
un espejismo,
que no existes,
que solo mi mente te produce fantasía,
y eres la mejor fantasía.

pedí un deseo.

gélido,
ártico,
me escupí del universo,
salí del cuarto,
fumé un cigarro,
apagué el calentador de agua,
regresé a la cama.

te inquietaste,
estabas cayendo,
cruzaste el océano,
esa galaxia,
la pesadilla te regresó llorando,
me abrazaste.

es de esos días,
que el viento te toca
y no puedes más que sentir en cada poro,
y las constelaciones se saturan,
y tu cuerpo está en el mío,
y quisiera morderte
comerte.

un deseo.

me abrazas,
caes de la pesadilla y me abrazas,
caes a mi pecho
me abrazas
y es como si me agarraras,
desde la luna,
al espacio,
caes en mi pecho
y me salvas,
yo era el que estaba cayendo,
solo,
a derivar al universo.

con un te amo
me regresas al cuerpo,
a la cama.

ando sensible,
y tu respiración
tu viento me toca
y no puedo más que sentir en cada poro
tu temperatura,
y de la nada,
todo está bien.

lunes, 26 de diciembre de 2016

casa




necesito tus ojos,
tu voz,
y todo lo eres,


ven,
yo necesito de ti,
quiero de ti,
anhelo de.

y soy frágil


ven, 
yo necesito tu voz,
eres mi guía para sentirme en casa.






tigre niño



al tigre niño le gustan las serpientes,
el arte de aprender,
dice mucho cuando calla,
siempre trato de descifrar sus silencios,
hoy jugamos ajedrez,
tiramos un par de guantazos en el aire,
viajamos en el corcel gris metal,
escuchamos música.

al tigre niño le gustan las serpientes,
lo veo volar ya no en mis brazos,
cambia lento,
admiro del tiempo ver mis ojos en los suyos.
yo necesito su canto,
fue la guía para salir del laberinto.


lo percibo sereno,
como una ciudad que espera la tormenta,
le ha tocado la vida complicada,
por eso aprendo a mantener el temple,
lo único que puedo otorgarle,
es la fuerza viento que presiento,
vendrá a hacerle suficiente falta.


al tigre niño le gustan las serpientes
y observa.

sábado, 24 de diciembre de 2016

de los cuerpos


 me has reconstruido con tus manos,
desde el nacimiento a la muerte,
tus pequeñas manos
de forma antagónica,
cargan lo infinito de mi  uni-verso.

si hay una idea infranqueable,
intransgredible, 
en un ser,
es la idea de la muerte,
la reconstruyes con la idea somnolienta,
y la mayor esperanza de verte.

me has reconstruido,
invitándome a tu sonrisa,
como quien deja la puerta abierta dejándote pasar.

he sido navegante al desapego,
irrumpiendo mundos,
transgrediendo cuerpos,
acuerdos.

y tu,
así,
sencilla,
me reconstruyes estigmas,
paradigmas,
desde los sueños,
los años
la vida,
la suerte,
la muerte


es imposible no querer estar en ti,
el querer fusionarse como plastilina a tu alma,
a tu cuerpo,
entrar por tu sonrisa y ver la impasible tranquilidad del mar,
es imposible no quererlo,
por eso entiendo más que nadie lo que pasa.

me he descubierto,
despavorido,
muerto de pánico,
afónico,
metiendo el freno,
echando la carreta para atrás,
cuestionando qué es lo qué ves en mi,
porqué decides estar con la impasividad del viento
y no he sabido responderme,
pero abres la boca
enseñas tus dientes,
 entrecortas sonidos
y solo entiendo que me dejas la puerta abierta.

 traté de cautivar tu risa,
tal cual,
cautivar.

no entendí 
que era la invitación a fusionar nuestros mundos,
me engalané de orden,
para que no vieras éste caos intravenoso del que estoy hecho.
éste humo que a veces siento,
ésta nulidad a la que me he aunado,
a los cartas y azares a los que uno juega
mientras espera a que pase la electricidad de una tormenta.

mi mente se rebeló,
me desquicié,
morí mil veces cada latido
y el corazón latía más rápido,
trepidando,
galopando,
previendo el abismo,
como los condenados a muerte,
que se niegan
y niegan
el tunel que deben pasar para llegar a la horca,
esta muerte lenta
de no entrar en tu risa,
y lo escribo porque debo recordarlo,
para no morir mil veces en los latidos ausentes.

¿cómo no querer estar en ti?
¿cómo un semidios no podría tener miedo?
el niño tonto que busca la inmortalidad,
se ha topado con otra idea,
de lo que es la muerte.

he corrido,
con suerte buena y mala mezclada,
he vivido 
y nadie podrá negarlo,
he muerto,
y nunca lo negaré,
pero
¿cómo tirar el miedo?
no sé,
no lo sé.
...
..
.



entiendo su porqué,
y no sé cómo tirarlo,
empiezo a entender cuando me llega,
entiendo que
siendo motor de no perderte,
ese miedo casi te pierde,
y me pierde.


y aquí estoy,
soltando mi miedo,
para entrar en tu risa,
esperando
 que despiertes,
para hacer de los cuerpos amor.














jueves, 22 de diciembre de 2016

deriva






hay muchos matices en tu ausencia,
tonos tan tristes que me siguen en la calle,
arrastrando la mirada con los tenis,
no me gusta abrir los ojos,
sacar la cámara no tiene sentido,
escribir no tiene sentido,
respirar no huele,
comer no sabe,
vivir no vive.

el mundo es gris sin tu sonrisa, 
es la brisa que hace soportables mis infiernos,
no quiero piel sin piel,
pertenezco a mi memoria táctil,
a mi poco grácil forma de amarte,

hay tantos matices de éste miedo,
con mi inseguridad 
patológica,
no sentir la caricia de tus ojos,
me provoca una repulsión en el espejo,
de ese monstruo tétrico que no me gusta que se escape.


no entiendo como se conjuga tu bella inteligencia,
como versan perfecto,
tu palabra y tu cintura,
a veces dices frío y entiendo lo que es ser ártico,
solo basta un exhalar para estar desnudos en la playa.


me perdí viajando,
con la noción de que uno es del lecho que construye,
me perdí 
perdiéndote de vista,
y que la vida es
por dos o tres que uno ama,
te perdí de tan perdido.


me perdí 
ausente,
me perdí en miedo por sentirte tanto,
he vivido la vida solo y en lo oscuro,
tanto que no supe que hacer al descubrir la luz.
al caminar deslumbras al tiempo,
lo pausas,
solo basta tu presencia para que yo sepa que existo,
y tu ausencia para que eso ya jamas haya sido algo.


¿¡eres/quieres ser mi puerto?
solo concibo derivar contigo














lunes, 19 de diciembre de 2016

las estatuitas de sal





No mires atrás,
ahí no está tu destino querido lot.


es noche y tengo frío,
mis dedos se congelan,
mi gata se lame las patas,
se embeleza.

y
 yo
 tengo frío.

me dirijo al exilio,
de los hombres y de los nombres,
me muevo naxos,
la isla del olvido,
me voy a la cama sola,
al abismo fúnebre que es el silencio,
al único acto de magia que conozco,
que es perfecto,
prestidigitación,
para la desaparición.


me llevo mis preguntas y mis dudas,
recojo el casco,
el ajedréz,
la camisa,
me llevo una sonrisa de otoño,
una charla de azotea,
una luna que por más grande es más pequeña,
una desesperanza,
me voy mentando madres,
escupiendo al piso,
chocando hombros,
me voy pues,
con el final del verano,
con mi silencio.


me voy preparando maleta,
recordando que la casa es un acuerdo,

cansado de las replicas y las explicaciones,
me voy a la chingada.


no mires atrás lot,
no te conviertas en sal.

domingo, 18 de diciembre de 2016

carta

Para mi es difícil no querer explorar el mundo, he sido muy curioso desde siempre, de niño con tu tío íbamos a todo sitio jugando a los exploradores, subíamos trepábamos, corríamos, imaginábamos mucho, he perdido algo de el espíritu de la imaginación, pero no del instinto explorador.  En cada viaje hallas cosas nuevas, viajo sin esperar algo específico, pero las charlas en la carretera y las personas que encuentras te dan muchas experiencias, a veces no tan agradables, muchas veces si, es una balanza.

Me gusta ir a las montañas, por alguna extraña razón me gusta ver esos paisajes. la fotografía es a veces un pretexto para encontrar lo majestuoso de éste mundo, para conocerlo desde donde soy, algún día espero poder contarte de éstos viajes y contarte de éstas fotos que he tomado, para mi es importante, creo que solo puedo darte la experiencia que he vivido y de alguna forma creo que te servirá.

Cada sitio adónde voy te llevo conmigo, te pienso, me cuido mucho, manejo prudente. Te pienso y sé que muchos lugares te parecerían aburridos en éste punto de tu vida, y entiendo que las preferencias que tienes van acorde a tu edad, siempre te llevo conmigo, porque tu eres el lugar adónde siempre quiero regresar, me recuerdas que tengo un hogar, que es importante tenerlo, ser parte de ti es de las cosas más importantes en mi vida.
He aprendido mucho de mí en cada viaje, en cada fotografía, mucho tiempo no pude viajar, algo en mi me impedía salir de mi zona de confort, hace poco más de un año entendí que esa limitación me hacía perder mucho de lo que me gusta ser participe, siempre que me siento mal busco tomar mi mochila y encontrarme en el camino.
La naturaleza humana es migrante, recorrer los paisajes y encontrar. Por eso me molesta cuando se habla de los migrantes y se les llama ilegales, las aves tienen derecho de viajar al sur incluso sin conocerlo, nosotros tenemos derecho a cruzar esas líneas imaginarias y desconocerlas, he encontrado la posibilidad de la posibilidad en el camino, la poesía que me habita, lo poco o mucho que llevo conmigo me sirve para sentir en cada sitio un trozo de mi.



Te amo Balam.

Cataratas




enamorando a las hambrunas,
aviones de papel,
dragones de terracota,
laberintos y minotauros,
ojos vendados,
glaucoma.

 la balanza desigual de la justicia,
una canción de cuna que te hace llorar,
futuros negados,
fruta podrida sobre el pasto,
que las personas rectas sigan rectilíneas
y las personas curvas sean montañas de cintura,
con el paisaje que tétrico de mi retina,
espejos que gritan como en sueños,
rosa de los vientos,
brújula imantada,
propongo una mirada.


la vida sucesión de olvidos,
polvo,
lithium y óxido de plomo,
el óxido de abandono.


esperanza de espera fantasma,
acción de paz,
paz-ciencia
...
..
.


abrir la posibilidad,
de la posibilidad,

ha desaparecido otra chica,
han tirado más balas por la paz,
han dicho más palabras por la misma.


he sido práctico y he golpeado,
con la resistencia irónica,
de extremos que al final se tocan.


lancé aviones de papel al abismo,
botellas con cartas en el mar,
hice del silencio,
lo que los flores a la primavera,
perdí el rumbo,
dejé de lanzar piedras,
bajo las nubes escondido,
robé mapas del camino,
la humedad hizo caer mis escuadrones
invencibles,
invisibles,
y ya no puedo 
pero he dejado de andar.















viernes, 9 de diciembre de 2016

Que lástima









Que lástima
 Que no a tenga los medios comprados
Y los recursos para tomar esas fotos,
De esa gran guerra importante,
Que llevará democracia,
A ese otro lado del valle,
Que no esté documentando,
Con mi garrafa en la mano,
Sobre  la sed y esa hambre,
De ese país pequeñito del que no recuerdo su nombre,

Que lástima

Que solo tenga el recurso
 para tomar éstas fotos,
de cosas no más importantes,
Como lo son éstas calles,
De Ésta sed
misma hambre,




Que lástima.


Que deba dedicar mi mirada,
A esa anciana que carga,
Un poco de fruta en sus bolsas rotas
 De propaganda política.

Qué lástima.


Que mal,
Solo puedo proponer mi mirada a esas cosas sencillas,
Consideradas indignas por ya no ser importantes,
Como la niña en limosna,
O el señor de la calle que es no más importante
Que ese político,
Gigante,
Candidato a un gran puesto,

Que mal,
Solo ponerle mirada
A aquél grande puesto de carne,
Con un ser desconfiado,
Con sus arrugas y canas,
Que no usa crema y gomina,
Como el señor candidato.








Que lástima,
Que deba dedicarme a otras cosas sencillas,
Que no impactan, 
De éste capital desigual.


Que lastima de astilla,
La que me obliga a ver noticieros,
Comprar otros sueños,
Que a mi no me hacen feliz.


miércoles, 7 de diciembre de 2016

Minos




tengo un minotauro entre mis brazos,
quebrado y en pedazos,
lo abrazo:
violenta-mente.

puedo enfrentar en sacrificio la embestida,
mira la ira de contenida de su frente,
contenedor continente.

 brazos, 
cuerpo de hombre,
 y el instinto irracional de ser cautivo,
desbocado,
con el canto afónico de un digno toro.

es difícil abrazar a un minotauro,
entrar al laberinto,
perderse.

te contaré,
 sin atisbo en convencerte.
que tengo a un minotauro entre mis brazos,
quebrado y en pedazos,
lo abrazo lenta
y violenta-mente.



te contaré pues,
que es difícil abrazarlo,
que suele bramar en paranoia,
que cualquier atisbo de victoria,
muere con tu muerte-laberinto.


yo no quiero matar al minotauro,
parte irracional,
yo no quiero salir del laberinto,
bebe mi piel,
sed de la carne,
yo si quiero alimentar al minotauro,
sed de otro ser,
suerte de muerte.


¿Qué culpa tiene en tener sed el minotauro?
de ser un hijo bastardo de los dioses.

viernes, 2 de diciembre de 2016

Salsa de Tomate




he escuchado del frío en primavera,
pero hoy siento calor casi en invierno
y no estoy preparado.


preparando,
lo que me enseñaste a cocinar hace unos días,
te explico,
que estás presente,
soy inclusivo contigo en tu ausencia,
no estoy hecho para coexistir todo el tiempo
y me cuesta decirte que te quiero
así, 
a mi modo,
aunque hoy no quería verte.

le he añadido un par de cosas a la receta,
un poco de atún por ejemplo,
cambié el queso,
y le puse ajo,
aunque ese no me gusta,
pero me sabe rico a tu compañía,
aunque hoy realmente no quería verte,
estás cerca
tal vez tampoco entiendo.

no quiero robar tu tiempo,
la vida es eterna en cinco minutos,
también pretendo respetes mis eternidades,
no quiero que haya guerras en la cocina.


mis padres arrojaban los platos,
vi esos huevos a la mexicana estrellarse,
olímpicos,
en la ventana.

así aprendí de la cocina el arte de la guerra fría
y como tratado de paz empecé a comer solo,
recuerdo a "juguete",
gato pinto que desde su primer día en casa,
jaló su comida abajo del sillón para no ser molestado,
en ese enigma,
descubrí el mayor tratado de paz 
interior,
cenar
solo.





como todo adicto,
tóxico,
he aprendido a sustituir cosas en las recetas,
en su momento coca y bicicleta,
marihuana y cerveza,
después café con cigarro,

y así.

cocí diferente la cebolla,
igual machaqué los tomates,
solo una pizca de sal. 

tal vez no entiendas bien que no estoy preparado,
pero sigo preparándote la cena,
aunque hoy no quiero que cenes conmigo,
veo la guerra fría preparándose en la casa,
no quiero ser quien prepare la salsa,
tampoco el que rompa las ventanas,
no quiero huir por costumbre al drama,
me asustan mucho esas tristes despedidas,
en que no entiendo qué ingrediente falta a la mesa,
no quiero que vengas aunque preparé la cena,
por hoy así está bien pensar en ti.


 me enamoré del río y de la calma, del sudor fresco que destilan mis albañiles, del café, de la fruta, de mis hijos. me enamoré de éstas roc...