lunes, 19 de diciembre de 2016

las estatuitas de sal





No mires atrás,
ahí no está tu destino querido lot.


es noche y tengo frío,
mis dedos se congelan,
mi gata se lame las patas,
se embeleza.

y
 yo
 tengo frío.

me dirijo al exilio,
de los hombres y de los nombres,
me muevo naxos,
la isla del olvido,
me voy a la cama sola,
al abismo fúnebre que es el silencio,
al único acto de magia que conozco,
que es perfecto,
prestidigitación,
para la desaparición.


me llevo mis preguntas y mis dudas,
recojo el casco,
el ajedréz,
la camisa,
me llevo una sonrisa de otoño,
una charla de azotea,
una luna que por más grande es más pequeña,
una desesperanza,
me voy mentando madres,
escupiendo al piso,
chocando hombros,
me voy pues,
con el final del verano,
con mi silencio.


me voy preparando maleta,
recordando que la casa es un acuerdo,

cansado de las replicas y las explicaciones,
me voy a la chingada.


no mires atrás lot,
no te conviertas en sal.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 con el tiempo la vida no se vuelve de uno, uno se devuelve a la vida a dar un poco de lo que recibe, y en ese afán de gratitud, uno se hace...