viernes, 22 de enero de 2021

Bushido


Hace poco me explicaron el Término "bushido" es un ideograma compuesto por tres Kanjis, el primero, es el cielo, la armonía, lo celestial, el segundo es una jota invertida, es como una cimitarra, que rompe lo armónico, y el tercero simboliza al equilibrio, en una traducción reduccionista sería como le llaman "el camino del guerrero" pero, en realidad, todo aquel que busca restaurar el equilibrio practica éste camino.

vivir en un barrio no fue sencillo, y cohabitar otros tampoco, la impotencia de ser agredido o vivir pasivo agresiones a quienes quieres y sentir la impotencia de no saber cómo responder ante ello me generó traumas, me quitó la paz, la tranquilidad, me quitó la inocencia,  a punta de vergazos, en carne propia o ajena. poco a poco fui adoctrinado a ejercer violencia o violencias,  mi ego se revela ante si cuando lo hago y me justifica a buscar tener razón, razones o motivos para ello, hace un par de años vi un documental, América Armada, en el cual uno de los tres casos se desarrollaba en Colombia, donde madres de víctimas de asesinato otorgaban el indulto a quienes habían tomado la vida de sus seres, aquellos a los que les pertenecían y les pertenecían, no entendí, el asesinato de Nadia y Ruben me tenía más cegado aún, restaurar el equilibrio te digo, aún no acomodo esa parte dentro mío, a nivel muy consciente sé que eso rompe un círculo de violencia y cambia de eje, no solo a quienes dan éste indulto, no imagino estar en los zapatos de alguien que ha tomado una vida y a cambio recibe a una madre así.

me he instruido en los caminos de violencia te digo y he luchado, peleado, berreado en ésta vida, por actos injustos que suceden a mi costado y también me han sucedido. Lo cierto es que no me gusta pelear, pero me disgusta más lo injusto, y sé que he podido por un lado si, "salvar", "rescatar"... apoyar.
pero del otro lado siempre queda una herida abierta, un ápice de dolor que sigue generando odio a aquellos a los que le tiré los dientes, y si bien no he visto adónde va esa frustración sé que va a algún lugar, nos educan a los hombres a no enfrentarnos al dolor de perder una "batalla", y seguimos perpetuando los caminos de la violencia, engrandeciendo el círculo y jactándonos de haber ganado, pero es síntoma de ver la vida como un progreso, pero en el progreso también nos enceguecen a pensar que todo aquello que se gana en un lado no se resta en otro, ver a los ojos de aquellos con los que he peleado y ver el miedo, resignación, dolor, me ha hecho ver mi propia mosntruosidad "inmediatamente después de que mueren los mosntruos, mueren los héroes, porque la naturaleza del héroe es monstruosa" dijo Calasso.

He roto el equilibrio, muchas veces y me he justificado ante ello, porque mi ego se revela a saberme monstruoso. Y sé que puedo dar cariño y que en esa búsqueda de preservar lo que amo, he tirado varios dientes, pero siempre me cuestiono, si eso solo es un eslabón más de eso que me sobrepasa y en lo que estoy inscrito, estoy aprendiendo, que restaurar lo ya roto es el fin, que el autocontrol es el medio que mantiene el temple, para que en una caricia, se redireccione esa energía, y así, pueda decidir qué es lo más justo para no perpetuar el dolor y eslabonarlo, y en efecto, no hablo solo de tirar dientes, porque eso lo puede hacer cualquiera.



jueves, 14 de enero de 2021

Balam 14/01/2021

 Hoy te enfrentas a tu primera muerte Balam, y se me hace difícil darle un nombre tan determinante a algo tan complejo, me gustaría decir algo profundo y sincero que te sanara el alma, a veces entre tantos duelos es difícil recordar el primero, me tocó un poco más grande que tu, fue mi primera novia, y si bien la muerte trae  secuelas,  también trae algunas enseñanzas, que se dejan ver con el tiempo. algunas culpas también y cuestionamientos profundos, más cuando nos tocade pequeños, lo primero que me vino a la mente es lo injusto que puede ser la vida para los que nos quedamos, que no sabemos repartirnos el dolor y quisieramos sanar a los que nos rodean sin saber que también debemos sanar nosotros, el shock, el mundo gira alrededor y no sabes qué pasa, todo se siente irreal, como si fuera una película, la capacidad de entendimiento que uno tiene se vuelve nula, y es como si no estuviera pasando, el shock, es tan fuerte que muchos no salen de él, la capacidad de negar lo que nos pasa para no verlo, no dalre nombre y enfrebtarlo si bien es una herramienta también se vuelve una muleta que nos obliga a cojear emocionalmente, aunque es muy pronto para que lo entiendas, pero hay shocks de los que no salimos, y no poder salir de ello es no poder enfrentar lo que nos pasa, no aceptarlo, no abrazarlo, la tristeza poco a poco se apodera, el llanto incontrolable, el no poder darle nombre a las emociones que nos cruzan y es que son tantas, preferir que la muerte se lleve a que sigan en una agonía es difícil, porque nos hace sentir egoístas y no sabemos qué hacer con ello, queremos preservar lo que amamos, pero el costo de la felicidad de quienes amamos a veces implica el sacrificio de dejar ir, no por ello, no por darle un nombre o un significado lo hace sencillo, pero si darle el sentido lo hace un poco más ligero. sé que no recordarás lo que me decías en el auto de camino a casa, y que el tiempo borrará por necesidad tu llanto y mi mano en tu mano manejando despacio, le di un beso a doña mari y me viste y si bien es tu primer duelo, tu primera pérdida, sé que te tienes reproches, hace unos meses, no recuerdas me dijiste que tenías miedo de que le pasara algo, y sé que sientes y que te sientes, y que la vulnerabilidad que nos trae la muerte no es fácil reanimar pero nos da vida, a veces me declaro muy Ateo Anarquista, pero lo cierto es que darle una dosis poética y de esperanza a mi me ha hecho estar con la idea de que nos volveremos a reunir, y beberémos un café, estaremos. no tengo certeza de esa esperanza, tampoco importa en éste momento, porque quizá no importa si suceda, pero aquí y ahora está sucediendo. Algunos duelos son difíciles, por la forma que llegan, quizá no sea un consuelo ahora, pero Mari vivió 85 años, y eso hijo, es algo a veces que a mis 34 ni siquiera puedo vislumbrar, entiendo que hubieras querido darle más cariño, más amor, ser más amable con ella o entenderla más y si bien esos reproches no te sirven de mucho si te servirán en algún momento, me he dedicado a arder la vida, por los que no están pero están en nosotros, por mi abuela, la que te cargó una vez es que soy en ella, y ella es en mi, está en mi y en lo que vivo, y está en ti y lo que vives, somos trozos eslabonados de nuestra historia y crianza, y así, ellos, ellas, son eternos en nosotros, porque te digo, no lo sé, pero quizá nos volveremos a reunir y tomaremos un café. sé que quisieras hacer el dolor alrededeor más leve, tu que eres la ternura y la nobleza misma tampoco te das cuenta que no piensas en ti, ni pensando en ti.


y si bien no es momento de honrar a la muerte si es de amar a la vida, y sentir, arder, cuestionarte, odiar a pleno el coraje que tenemos de ésta falta de comprensión de lo que es existir y sus porqués, si bien te digo, soy un optimista patológico al que la vida ha tratado mal, y no podré protegerte de los dolores del alma, pero si mostrarte un trozo del camino andado que me ha tocado y que también vive en ti, que vivirá en ti, y aunque hoy no lo sientas, ésta vida vale la pena, y sus porqués y cómos se irán acomodando, Te amo Balam, dejo ésta capsula en el tiempo para que la neblina del olvido no nos robe la memoria.







sábado, 9 de enero de 2021

Informe 34

 



éste año me enfrenté de cara al sol, y me quedé ciego, busqué el tacto y en el acto depuré la vida, o la vida me depuró 




hace un año mis 33  empezaban con Kai dormida en mi cama, hoy el regalo es que me espera, mientras balbuceo qué escribir sobre éste año, me trató mal, muy mal, y fue más que eso, los pendientes emocionales, las deudas, las culpas lo que lo hizo, eterno, las muertes, como siempre.

éste año no ardí, me incineró la vida, y es precisamente que soy ave de magma, que fluyo en ríos de fuego. No hubo algo épico en realidad, todo parece calmo en el lago de la memoria, no estuve ni una pizca cerca de la muerte, pero si me ha rondado como nunca, llevándose de más. Perdí amigos, perdí amor, perdí la cuenta  de cuántas veces me he roto y cuántas veces me he lanzado al amor, así que me puse en pausa, contemplé lo pasado con expectativa de futuro, y respiré profundo, lo jodido fue mucho, pero lo rescatable es: toqué fondo, y no quiero volver a estar tan emocionalmente equidistante de mi y mi cuerpo, perdí mucho te digo, la fe en mi, pero la búsqueda de hallarme después de ello me ha venido bien.

así que haré el recuento breve, me deshice de amigos abusivos, me salí de proyectos gandallas, me aislé en el desierto y lo curioso es que me abrí puertas en ello, me abrí puertas de reflexión e inflexión, después de tanta rudeza innecesaria al fin encontré lo que no quiero y adónde no quiero ir.

me dediqué a mi cuerpo y mi mente, después de la gallera, donde incineraban a seres humanos, de los que no dejaron ni polvo, me dediqué a mi hija a no caer cada que debo estar lejos, hallé que no soy tan malo como pienso y que tengo más que ofrecer, de mi a los que quiero, a los que me quieren, ésto es para mi. me pertenezco y le pertenezco a cuatro árboles de mandarina, tuve la muerte de perder mi cámara, la que fue mi fuel compañera. hallé a Majloc, entre tanta podredumbre siempre hay gente bella, mis días dejaron de hacer foto por inercia y llegará el día. Luis me enseña de la vida más que de Karate, mi madre, valor innegable, Balam crece y se enfrenta a la pronta muerte de su bisabuela, anoche me despedí de ella, Andrea me movió la vida, me replanteó. Gio, mi pitonisa.  la bici la dejé en pausa, Raúl me devuelve la belleza de creer en mi belleza, citlali me hace entender el tiempo y a través del tiempo, dejé de lamentarme y dejé de pisotearme, retomé la pluma y a entendí que soy amado, y que a veces hablo de menos y digo de más, que he podido mover algunos mundos, vi los trenes pasar con Kai en brazos, me di una pausa mi sexo decidió no querer, mi mente ni abusar, y me entregué a sentir. la cagué en mucho, al menos es claro decirme cuando la cago, quiero crear y creer y dar y que me den, amar y amarme, quiero creer que hay modos de hacer un mundo más equitativo, lavé trastes, y lavar m ropa sigue siendo un acto que me llena de reflexiones. tengo amigas entrañables, que me han abierto el mundo, he encontrado seres que me ponen los bellos como estalagmitas de solo hablar, tuve dos expos, y pocas fotos, participé en un proyecto con personas privadas de la libertad por parte del estado y escribieron sobre las imagenes que tomé, que no son mías, que son y a veces a través de mi, cerré vínculos afectivos y solo goteo a veces sin razón de los lagrimales, no entiendo bien, me respetan muchas personas, y a veces se habla más dela leyenda que hay alrededor que de lo que soy, pero realmente qué soy? depende de dónde se hable, soy dictador, o padre, soy fotógrafo o poeta, puedo ser amante o luz de noche, puedo ser ausencia, ausente, puedo estar tanto y dar tanto que me quedo hueco, no he hecho todo tan mal, pese a mis malas decisiones, me reinvindiqué a mis ojos, me abracé me sanaron la rodilla y me quité pretextos para no saltar, mi mayor insurrección es seguir en Xalapa, pese a que las posibilidades cada vez son menos, me han amado y odiado en la misma balanza, sigo vivo, sigo sobrio, casi 13 años o 14, ya no sé la terapia me acomodó el alma, y me falta disciplina, tiempo, café. 


hoy no brindo, porque si bien me da curiosidad lo que falta, me da amor lo que llevo, que bien visto no es poca cosa, y por ahora, mi corazón me espera en la cama, y mis manos se hielan, sigo creyendo y creando, quizá más solo, pero mejor acompañado.






jueves, 7 de enero de 2021

La mala suerte soy yo



Me ha venido la mala racha, con sus costumbres,
y he decidido,
esparcirme el polvo,
y devolverle 
una
 sonrisa.

 vino la grúa,
vino cáncer,
vino sombra de la risa,
vino lluvia y vino niebla,
vino el vino 
y me esparcí el rocío,
para devolverle la sonrisa.


vino la gota que colma,
el charco profundo,
el zapato roto,
la muerte indiscreta,
vino a darme un jaque mate,
yo que soy artífice de esperanzas,
del tiempo y sus venganzas,
vine vestido de luto,
me puse en pie,
enderecé la espalda,
acomodé la rectitud de la risa,
y me devolví a mirar.

Vino por costumbre,
a doblarme la rodilla,
mientras cargaba a mi niña,
pero,
pero me encontró,
apretando músculo,
apretando el pulso,
sin perder impulso,
sin dolor, repudios,
y me aventé a correr,
yo que decía que era muy cobarde para luchar,
y muy gordo pa correr,
me le aventé de frente,
le bese la frente
y la mala suerte que nunca espera nada,
me escupió un poco más.

vino riendo la mala racha,
pidiendo la dádiva de malestares,
mostrando los colmillos en la espalda,
vino de la leyenda del viento,
delo que es y no siempre cierto,
vino cargado,
de duelos,
de anhelos,
rotos y por romper,
vino con flemas,
vino a pedir apapacho y ternura,
afecto de nostalgia madura,
pero me he hecho rudo,
y puse el peso en el centro,
y equilibré los pesares,
acomodé la latitud horizontal de los ojos,
y me eché a mirar.

vino a buscarme en una curva,
en un acelrar,
en parpadear,
vino ahogándose de llanto,
pero me agarró aferrado a la vida,
a mantener el temple,
a no perder estribos,
y supe virar,
vino buscándome líquido que liquida,
vino en rebaja,
robando mi cámara,
y la cartera,
echando a perder el disco duro,
donde resguardaba mi memoria,
rompiendo mis chapas,
y solo queda retar,
yo que soy la mala suerte,
me vas a venir a contar.

llegó casi de cumpleaños,
de comida y saborear,
vino sabotaje en cada viaje,
vino con muchos dientes,
pero no los suficientes,
para hacerme gritar.

vino a acosarme en mi cumpleaños,
joder que si me quieres ver jodido,
pero tengo el corazón más ancho,
y la voluntad más quieta,
para poder burlar,
de mi y a mi mismo,
que la mala suerte se eche andar.




lunes, 4 de enero de 2021

hop-e


nuestras lenguas se tocaron tanto que crearon un idioma,
decías tanto mi nombre que te costaba olvidarme en hombres,
mis garras me desgarraban tu espalda de felino,
a veces era noche insomne y otras desayuno,
un día estabas contra la pared 
y otra me adornabas toda la garganta,
ahora estoy entre la espalda y el olvido,
como daga, también como crucifijo,
un día ascendía del magma a tocar tu vientre,
después tus ojos de glaciar descomponían veranos,
metí tus manos en mi pecho y terminó el invierno,
 y en otoño se quedaron siempre daños.

creamos tan pronto tan solo un idioma,
que nuestras azoteas se volvieron playas,
canciones, noches de mezcal y bromas,
tu baile se volvió mi laberinto,
y las pléyades de vernos nos pedían deseos,
y nos escondíamos en la vainilla y en las azucenas,
aunque cada cena ya era desayuno,
cada noche gritabas mi nombre,
yo no supe nunca un mar distinto,
más que el del silencio de cada sirena,
no supe más que confortar, me esconde,
el silencio como tiranía,
me hice dictador sin portar cadenas
y resulta que no siempre se puede comer mandarinas.

te diste cuenta que me acechaban los fantasmas,
y que de mi pecho solo salen torpes miasmas,
tengo un dulce dolor en cada desayuno,
y en cada letra yo escondía tu nombre,
porque todos mis espejos siempre son de humo,
y cada camino y que te acechó pierde,
todo encuentro más inoportuno,
  que tengo talento para ver y dar,
aunque no tengo nunca en que ofrecer futuro,
me hice esclavo yo ya del presente
y ahora no quiero atravesar los vientos,
para no decir que me dejaste mudo
y que en mis cuentas no me salen los cordones,
que me ahorca la mala memoria,
y que te olvido pronto solo por invocar fortuna.

ya sé que me perderé 
y que andaré desnudo,
que camino con el corazón de kamikaze
y también que es la última vez que recitaré tu nombre...


 

sábado, 2 de enero de 2021

beso de frente

 


He mendigado besos entre los coyotes,
que desahuciados y hambrientos se despedazaron,
entre labios de codicia,
de ambición de expropiación,
de adquisición,
a lo que nunca fue de nadie.



he tenido besos de loro,
de lodo,
de oro,
de musgo, de río,
de tierra mojada y de hastío,
de hastío
y sin embargo,
he errado en los besos que no he dado,
para definir amor.

he tenido besos de orgasmo,
de hartazgo,
besos tan mudos que solo podría describirlos con las manos.


he besado bajo la virgen de los improperios,
me han besado tan blasfemo,
que pocos demonios anhelarían ese estertor de orgasmo.


he descendido a los infiernos,
uno a uno,
en círculos finitos,
he caminado a media noche entre los valles de la muerte,
tanto, que le prendí un gallo a un cholo,
y no me pidió la hora.


he bandeado ebrio de amor,
enfermo de enfermeras,
y de diazepam con resaca,
besos crudos de cruda realidad,
que hasta le besé la banqueta para ponerme de tapete,
tanto,
que besando me quedé sin labios.


he volado entre palomas y laureles,
he asestado besos,
antes de existirlos,
he abortado besos,
me han acribillado con una ráfaga
y lo digo,
son más los ausentes,
los a medias,
los que por amados,
criminales,
los besos que son y no son y se hacen asesinos.


he besado de ternura y de memoria,
de besar tanto que sé,
que no sé besar,
he besado tan tieso,
que los muertos se ofenderían de tanta frialdad,
he besado si,
he besado no,
qué sé yo.

he besado,
de juramento roto,
de judas y de flato,
de amor y de amigo,
he besado amargo,
entre todo ello,
lo pasado y lo futuro,
solo anhelo,
poner mis labios en la frente de mi hija,
cerrar los ojos,
y abrazar,
su olor.



 me enamoré del río y de la calma, del sudor fresco que destilan mis albañiles, del café, de la fruta, de mis hijos. me enamoré de éstas roc...