domingo, 12 de abril de 2015

primera lección de la prudencia

Para Balam,
mi Hijo.


Hoy la vida es bella,
cada día lo es más compleja,
en tus ojos, aún pequeños,
sigue habiendo muchas preguntas,
en algún punto, observarás leyes injustas,
también te preguntarás de su porque.

Hace días me dijiste que hay un niño de tu escuela,
que te agrede y te sofoca,
también me hablaste de tu prudencia,
que evitas su contacto,
te diré que ese niño es un reflejo,
de sus padres, del entorno,
te dije que haces bien en no enfrentarlo,
la violencia no siempre ha sido un buen camino,
que en mi utopía no quisiera nunca haber peleado,
pero algo siempre tuve claro,
que si un día tienes que alzar los puños,
lo mejor es que tú ganes,

con ética,
entenderás que un enemigo que es humillado,
será siempre un enemigo,
elige cuando es necesario alzar los puños,
cuando se gana más con dialogar,
el autocontrol es importante,
es el único camino para ser bien digno,
un ser fuerte es aquél que conoce en dónde es débil,
alguna vez peleé y al terminar estrechamos nuestras manos,
como dignos caballeros,
algunas otras no aceptaron bien a su derrota,
otras no debí alzar mis puños,
solo una vez tiré un primer golpe,
ahora sé que  fue el más innecesario en todos ellos.
He tenido suerte y mucha suerte,
no sé se algún ser me ha bendecido,
nunca dejes que el miedo te paralice,
pero es muy necesario tener miedo,
te mantendrá alerta cuando sea bien necesario,
no tengas temor en admitir que tienes miedo,
para poder ser ayudado,
es importante querer saber a que le temes,
para saber a dónde vamos,
aunque no tengamos la certeza de un camino,
se va aclarando a cada paso,
no hay límite ni el cielo,
hay muchos obstáculos de suelo,
pero aprenderás a andar,
correr ser libre,
también sabrás echar raíces,
en tierra firme también hay cosas que querrás.


Te amo como no tienes idea,
hoy que vimos películas, cortometrajes,
que te leí los subtítulos caracterizando,
recordé a tu abuela,
que ha sido buena madre,
algún día me entenderás,
no por si tienes algo que perdonarme,
más bien para poder volar.

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