tal vez por eso siempre llegas tarde,
porque aún no llegas al presente,
a mi no me gusta la nostalgia,
por eso olvido rápido,
Vuelo, me desollo,
tal vez por eso evito llegar tarde,
al contrario de ti me gusta esperar no que me esperen,
soy expectante, también soy un navegante,
que transluce sus alas al vuelo.
no estoy acostumbrado al buen trato,
al maltrato mucho menos,
he encontrado la constante,
han tenido miedo.
han tenido miedo al amor,
al rencor,
a la agonía,
me han comentado que soy buen amante
después para desaparecer.
han tenido miedo al amor.
tu habitas la nostalgia,
quizá por eso siempre llegas tarde,
yo quedé bellamente harto,
de vivir del pasado,
de olvidar el presente
y recordarlo mañana.
la constante es el miedo
y han preferido herir en defensa propia
y al final voy sanando,
curando,
porque voy como un animal herido,
y no soy fugaz volátil viento,
pero por las noches hago menos
y te podrías acercar a mi.
tal vez por eso llegas unos años tarde,
hoy me pesa que quiero caricias en mi cuello,
que lentamente me impaciento,
que por primera vez se me va la vida.
esa que he vivido,
que he negado.
y siempre tengo una brújula en el pecho,
sé reír y sé llorar,
siento y sé que tengo manos
y que son dignas,
siento y sé que conozco la naturaleza en mis males
y que son lindos fractales,
de los que debo escapar.
no quiero sorprenderte si un día me canso
y hago el mayor acto de amor,
el ajeno y propio,
prestidigitación,
el de desaparición.