viernes, 22 de marzo de 2013

bítacora 2



bitácora de viaje.

la luz amarilla se filtra a la ventana,
el hombre de metal me invita el desayuno,
empuño un cigarro,
bebo café.

desciendo hacia el  asfalto, 
siempre hacía el asfalto

la casa de mi hermana es cielo, 
que me cobija,
que me dibuja bocetos
de ciudad-felicidad.

es curioso ser un extranjero
dónde siempre ha sido casa,
y en casa ser el extranjero.

Aves de metal en la azotea,
frágil tranquilidad escalera,
que me defiende.

cinco gatos, 
en su casa de calvario
y Frida me despide, 
cordial y atenta me despide,
con los dedos sucios 
y costras de olvido me despido.



hallo a Marcel, 
hay pocos abrazos, 
tan bienvenidos,
él me ofrece más que brazos,
y no,
  no hablo del café que anima,
él es la ciudad que me recibe,
con sonrisa hospitalaria,
me recibe.


te diré, 
ni siquiera a Admeto,
le tengo tal cariño.




jueves, 21 de marzo de 2013

pensaba celebrarte como suelo,
en silencio,
dedicar mis palabras al silencio,
escribir letras en el aire,
como en tus muslos escribí mientras dormías,
musitar.


el inicio de la primavera marca un cambio,
me importa un pito lo que digan astros,
si no hay rastros de migaja a tu camino,
no hay forma de volver a casa.


atardeceres





miércoles, 20 de marzo de 2013

Bitacora de Viaje archivo de memoria, numero 1

esperaba regresar,
no sabes como lo esperaba,
esperaba regresar.

 la ciudad de los coyotes,
suspira tranquila,
el nuevo viejo aire
de viejo nuevo mundo,
me desconoce como cualquier ciudad.

cierto, lo olvidaba,
la ciudad me recibe hospitalaria,
tanto,
que me siento justo cual zeús ante Admeto,
pero no soy Zeus, ni lágrima de ambar.


te contaré un poco de Admeto,
quién puede si no la muerte ser tan hospitalaria,
para hacerle servir a un dios como un esclavo,
¿quién puede?
 si no el único
 que te hospedará por siempre,
sin negarte su morada,
¿quien puede si no?
por que los dioses como las princesas,
también,
mueren.

te contaré pues mi experiencia de viajero,
y tal vez no el por qué de éste viaje,
del tibio líquido viraje,
la búsqueda que no se encuentra
por qué no sé por qué viajo,
tal vez para sentirme cerca,
auqnue sepa que hallarte,
hallarme,
en esta ciudad es imposible,
y sé que dejaré de creer en el destino,
si no te veo nunca más.



en las entrañas del animal sin nombre,
cohabitó con un señor,
sesenta y tantos me parece,
huamantla se asoma en los letreros,
y las ganas de orinar no se contienen,
amable, siempre amable,
musitando, susurrando,
hablandole a sus voces,
ablandará sus roces,
internos que acompañan,
a mi cuerpo en su presencia,
que destierra.

el primer encuentro de salida,
éste señor,
habla solo, visitará a su hija,
y espera llegar a tiempo
tan solo para montar el gusano vortex,
ese metro de ciudad.

él,
habla solo,
como yo solía hacerlo,
me cuenta de un zumbido que llega con los años
y no sabré decirte si mis años
o zumbidos ya se fueron,
si se perdieron y algún día me encuentren,
como su tierna vocesita de señor
que musita canciones e imagina,
que las voces que yo escucho hablan con él.

es tarde, tan tarde que la noche me ciega,
con sus lunas de ciudad en su horizonte.
hay dobleces en las lineas de mis ojos,
que arriban cercana a la ciudad de los coyotes.

Relato procesado.

19/03/13








 de mercurio,
metal en guerra





Cafeleería













méxico df...


lunes, 18 de marzo de 2013

Gracias






gracias vida 
gracias sol,
gracias tarde llegué tarde
...
gracias ros

.
Autoretrato de tarde y viento 

martes, 12 de marzo de 2013

libertad y esperanza

he evitado decirlo,
y si lo mencionas si,
lo sé
            estoy en crisis.

En esta crisis capital,
de no esperar nada,
déjame te cuento:
no espero el amanecer,
 ni la noche,
ni despertar
 o dormir
menos,
mucho menos,
                       soñar o morir.


tampoco si estaré en la playa,
con un sol naranja,
que sea el post data tormenta.

no espero,
 que regresen los amigos por la tarde,
con nuevas o viejas historias,
me importa un tan poco
conocer
 o reconocer al que existe,
       existió,
              existirá.

ni una pizca una mierda,
un tan nada,
 un tan casi nada las ganas de llorar,
que se contienen,
con el conocimiento
que hasta las lágrimas se acaban.

y tal vez es eso,
solo soy polvo,
que anhela ser lágrima de ámbar,
que solo soy,
me convierto tan solo,
 tan nada,
tan lleno,
de vicios y vacíos.

te diré
no importa irme,
quedarme,
despertar o no,
pesadilla o sueño,
luz y sombra,
caminar sin camino,
no importa ya.


una pizca de nada
si no escucho voces en mi cabeza,
si me siento solo
 o acompañado,
es tan nulo,
que ni la curiosidad tiempo me mantiene.

tengo tan poca esperanza
y tan nula libertad,
de los deseos que tuve,
de lograr "algo"
que es mucho más que nada,
solo queda un manojo de aire en las manos.

tiene tan poca importancia,
si con luz pinto bien o  mal,
es lo único que sé
y no me importa.

tan nada si me tocan la piel,
tan casi nada si me tocan el aura,
ni siquiera me siento,
como un triste árbol hueco
ese  reverdece,
ya tanto tiempo esperanza
de lo que viene,
que ésta noche aniquila,
todo.





un crisis, tan total,
y por igual manera que a ti,
 me importa una reverenda mierda lo que siento.

y de nuevo tan libre y tan lleno de esperanza,
que espero tanto y no pasa nada.


curioso


mi capital fue mi barrio,
cuando decidí no pisar esa patria,
me dirigí como globo, 
pretendiendo,
simple,
el cielo.

hay una bella fortuna,
en tener curiosidad gato,
pero si algo entiendo,
es que los gatos se cansan,
como a mi traicionera gata alba,
que bauticé,
cual bello fantasma,
que yace cancerígena a mi lado.

nadie niega la cruz de su parroquia,
y te diré que desde hace días,
 tengo hambre,
de el tornado de mi barrio,
que gritó a mi madre,
al ver a ese antiguo gallo,
tengo unas patéticas ganas
de tirarle sus dientes,
tarea sencilla,
solo conserva tres.

sé que fui,
impulsiva-mente, tempestiva-mente,
por momentos odio,
por impulsos sangre,
lo que anhelé.

(inconcluso)






Querido Viento


Querido Diego, te abraza Quiela
Elena Poniatowska


Ojo de Viento
By Sergio Elefante 

sábado, 9 de marzo de 2013

profiere


hoy soñaste entre mis brazos,
es curioso pequeño,
yo te cargo
y tu, eres quien no deja que me caiga.

somos copia fiel,
fiel copia de la risa,
y sabes,
me dijeron hoy:
 "el tiene tu mirada,
tienen la misma forma de observar".


me diriges,
como a un globo el viento,
me diriges,
llevas lejos mis tormentos,
por eso sé que todo vale,
más la risa lo que un sol.


días pasados de tormenta escasa.

caminamos y si,
 digo caminamos,
aunque entre mis brazos sueñas,
eres el motor y mapa,
eres sol y sombra,
inocencia, magia,
la liquida impaciencia
que se escapa,
a un río de memoria de mis tiempos.

últimamente,
que anido lejos de los cisnes,
que ando,
 terminantemente solitario,
que camino distraído
con mala suerte y casi con desgana,
solo me mantiene en calma,
el poder verte,
sentirte, abrazarte, quererte
y pensar en como enseñarte el mundo,
bueno, tratar de explicármelo primero,
para poder mostrarte algo,
lo poco que sé me ha sido útil,
no sé si enseñarte,
que aprendas a aprender,
o tan solo que aprendas a querer,
lo que el buen tiempo nos profiere.



viernes, 8 de marzo de 2013

en tu belleza la muerte





Viento



me estoy descubriendo,
más solitario y distante,
más sociablemente determinado,
a saludar cordial y excluirme,
me descubro más decidido
educado
y cansado,
no de torpes indecisiones,
si no del temple,
que inaudito,
 pensé no llegaría.


me descubro débilmente enamoradizo,
por eso me excluyo quizá,
para no asentarme en la tierra,
que llegará,
con atisbo de esperanza sé que llegará,
soy feliz,
seré.

hay pocas cosas que envidio,
la fuerza sutil del viento,
y no el amor de fuego,
que me caracteriza,
el único amor de viento
amor paciente,
que fluye y se siente
un vértigo hermoso,
un amor suficiente,
o casi suficiente,
 que si,
  en definitiva es lo mismo.


ayer le di una espada a Balam,
y un grito de guerra,
espada-maginación
 que cortó sus miedos,
nos dio venenos,
a los males que alejamos.

te contaré que me convierto en juglar,
para que mi pequeño jaguar
 sienta confort,
sienta contento,
de jugar
conmigo libremente,
y te diré que extrañamente
extrañaba un jugar eterno,
como niño en un parque.

ayer balam me persiguió,
me di vuelta súbita,
me agaché y de sus ojos
destiló a sus labios un te quiero,
tan absoluto,
que quise escurrir en llanto,
pero surgió el canto,
abrazo en risa y vuelo.

 pequeño niño selva



dejaré que hoy corra el agua,
que corra el tiempo,
que corra la voz en verso
tersa luz que me acompaña
que se aleja un poco.




lunes, 4 de marzo de 2013



4, 27

No permitas que la sombra alcance,
Que el tiempo avance,
no dejes,
que la tibia soledad te atrape
A ti, que de tus pocos sueños me levanto.

No es malo vivir en paranoia,
 excluirse de victorias,
acostarse con Pandora,
y que ella sea el péndulo en mi cráneo.

A veces,
hay que dejar a una furibunda rosa,
 que bese líquidos anturios,
Turbios lunes te amamantan,
con café, leche, atún y los cigarros.

Hay cuerpos que apestan,
a muertos torpes que liquidan,
en el río de los olvidos,
la paternal sonrisa que me asfixia.

Coronaré de olivos los recuerdos,
De la cenit corona de tu frente,
Vicente mi primer torero muerto,
que mataron de dos balas en el seno,
y sus costillas reventaron,
como la idea de dioses bienvenidos,
Será, que en las esferas de cristal,
Nunca se hallan los fantasmas.


pero yo viví mis excusas en el lodo
y las asquerosas fallas me sostienen,
Soy el ente dual que se transfiere
a su vida y triste paranoia,
y si ya no ayudo a los toreros muertos,
que el toro de su mente abotagada,
de alcohol y mierda su tormento,
la pus, su lodo es sedimento,
 y Lo siento,
 pero hoy apoyarte por hoy no será mi causa,
Agradezco a los cuerpos yertos de mi historia,
Dolor y pérdida en el vientre,
Que la mejor suerte me profiere,
Protege de la luz y sombra inerte.


No dejes







domingo, 3 de marzo de 2013

yo


Nací en Xalapa, un  8 de enero, niño inquieto,  desafortunadamente, me toca ser integrante de una  familias desintegrada, padre ausente y violento, indiferente; madre depresiva, sobre-protectora, permisiva.

 soy  rebelde hermano menor,todo esto provoca en mi  la gestación de mi personalidad.


Son tal vez los elementos detonantes del miedo, angustia, soledad. al suponer en ocasiones que podía lograr avenir a mis progenitores que quizá “por no ser buen niño” mi padre se marchó dejando ruptura, abandono.

La posterior violenta irrupción de artemio en la primaria,  me profiere y golpea, lacera mi cuerpecillo de once años, me exhibe indefenso, ante mis amigos, maestra. me vulnera y debilita, desencadena mis dualidades, necesidad-autosuficiencia, afecto-odio, debilidad-fortaleza orgullo-humildad, nunca más se borrará mi estigma.

Quizá es en este momento cuando la soledad me aprisiona, sumada a sucesos de pérdida, en mi aislamiento trato de eludir al dolor, perdidas irrevocables, fatales, arrasadoras: la muerte de mi primera novia, el asesinato de mi amigo de la secundaria, el fallecimiento de mi tío, de la abuela, uno tras otro se van, dejan cosas, palabras, acciones pendientes.

 Las siguientes relaciones significativas de pareja que no se concretizna, me muevo entre la aceptación y el rechazo, amor y desamor, encuentros y desencuentros desafortunados.

Vivir, morir, sufrir. las adicciones me hacen conocer más, más violencia, más agresión, más destrucción se agregan y restan, sin embargo salgo con el cúmulo de experiencias como sostén, un atisbo de esperanza que se refuerza con Iqui Balam, mi hijo me resucita y me ata a la vida, me permite reconocerme débil. ese niño me alienta y resarce pérdidas, en el fondo de esos pequeños ojos está todo.  la vida hasta parece que vale la pena al mismo tiempo me desvela la posibilidad de acceder a un cierre paulatino del proceso de auto-devastación e irónicamente un miedo mayor.

con mala caligrafía y buena ortografía escribo, pequeñas historias y poemas, alrededor de los doce años
empiezo a descubrirme, en  letras, desasosiego e impotencia, soledad eterna,  belleza etérea que se  percibe.

Fui un excelente alumno desde preescolar hasta secundaria y muy malo en bachillerato y licenciatura.


En el proceso de tomar fotos me veo transparente,  ese  liquido dolor de muerte. la muerte que identifico con la belleza del cuerpo humano, del desnudo, los rostros y el paisaje.  un poema a cada cuadro..

 me enamoré del río y de la calma, del sudor fresco que destilan mis albañiles, del café, de la fruta, de mis hijos. me enamoré de éstas roc...