martes, 26 de septiembre de 2017

réplica






estamos aquí esperando réplicas, 
aunque doblega el miedo,
  la incertidumbre ya no pasma,
estamos esperando en los escombros,
que más escombros lleguen,
para acarrearlos en cadena,
y hacer patria,
 del sitio del que nunca fuimos.

hemos visto la muerte y la esperanza enfrente,
en ésta ciudad que renace de sus cloacas,
de sus mamposterías y sus cristales,
de sus trabes rotas,
de sus puentes,
ciudad que revive
en donde lo que basta,
es la solidaridad para estar,
en donde alzar un puño es convertirse en héroe.


estamos esperando en los escombros
y nunca otra vida había valido tanto.

adentro de las casas, cuando no llueve gotea
y solo se puede agradecer a la mano compañera,
a la lluvia que escampa.


nunca la presencia de ministros y soldados,
 nos había estorbado tanto,
con su indiferencia cínica de enterrar más a los que ya están enterrados,
de querer quemar los árboles caídos,
del presidente municipal que se llevaba las cajas de insulina.

pero aquí la gente se organiza,
se reparte y no se deja,
la réplica viene,
y aunque doblegando,
organizando y haciéndonos más justos,
para reconstruir tras el temblor.


nunca pese a todo ellos nos habían estorbado tanto,
para repartir lo justo entre los necesarios,
para seguir buscando en esperanza,
lo que la fe ciega y templanza,
 jamás nos había otorgado.


viene réplica estertor de tierra,
viene la mano con su líquido amor,
viene la pala ciñendo el niño,
viene al paso en silla luciendo bondad en esplendor,
viene tormenta,
vienen pesadillas,
viene el abrazo de confort,
en
réplica









viernes, 22 de septiembre de 2017



-¿fumas?, y me veo consumiéndome en el humo, en las brasas, me veo con el rabillo del ojo como una colilla, consumiéndose en el cenicero, -no, solo tabaco. respiro hondo poniendo los dedos cruzados tras las nuca. solo se distingue la osa mayor en el cielo, pese a las nubes grises de ciudad, aún hay días de estrellas, y noches.  la osa mayor... parece un sartén. -¿porqué no fumas? 
he lidiado con esa necedad varias veces, y he oscilado en respuestas muy complejas, no gracias, soy adicto. si me pagas los siguientes meses de peda me la juego.  no quiero, soy adicto. -porque no lo necesito.  


un sartén, no le veo forma de osa. vuelvo a verla, curiosa.  me veo consumiéndome en humo, saco la cajetilla.

 en la mesa, en igualdad de condiciones dos ejércitos, nunca me ha gustado ganar, o competir, en el cuarto, giran cuervos con caballos, alfiles, ratas de frack, giran en vertiginosa espiral, estilistas, estatuas, ancianos, giran en sueños los durmientes de la calle, vitrinas, letreros, giran.

-te toca.- tiro al azar, no me gusta competir, he aprendido más de mis derrotas que de las victorias, mis victorias, como mi último tiro han sido azarosas, las que me importan.

un cuarto con elefantes andróginos y huacales con poetas, verticales. 

creo que solo me esfuerzo para ganar cuando el otro es soberbio y déspota.  supongo que eso es a lo que le saben las victorias a los demás, la adrenalina que siente el apostador, la pelea del borracho, el tabaco con coca.











domingo, 17 de septiembre de 2017

shock




¿en dónde está la muerte?

antes,
cuando niño,
 pensé que la muerte vendría tocando la puerta,
avisando lenta a las despedidas,
que les daría tiempo.

será que me hago viejo,
pero ya no siento que aunque toque la puerta,
habrá tiempo de despedirse,
vi a mi abuela morir en un cáncer muy lento,
desgastante.


no fue mi primera muerte
y viendo las cosas a contraluz,
fui afortunado con su tortuosa y muerte lenta,,
me dio el tiempo exacto para despedirme,
un año.


la primera muerte me llegó en la pubertad,
con el nombre de mi primera novia,
si bien fue cosa de dos semanas,
el tiempo es inexacto en éste caso,
su muerte fue,
tan natural,
como un virus lo es.


uno espera como le pintan en los cuentos de hadas,
que la niña se compone
y hay un felices por suerte,
pero no,
no creo en un dios bendito ni malévolo,
eso es de otro cuento,
pero aprendí a odiar a la vida,
gracias a la muerte.


peor que las despedidas,
ahora entiendo,
es no despedirse.


nunca conocí a mis abuelos,
mis figuras masculinas son precarias
mi cercanía a la muerte es femenino.


cuando supe de Nadia,
mi NadiaVera,
caí al sillón,
entré en shock.

no he salido de el
...
..
.


¿dónde está la muerte?


acabo de ver una inmensa lista,
casi mil trescientas mujeres,
asesinadas.



muchas sin identificar

pensé que la muerte vendría tocando la puerta
y que habría tiempo de despedirse
y antes habría un felices por suerte,
y habría alguien a quien dar gracias.



casi mil trescientos cuerpos,
que tuvieron nombre.





























martes, 12 de septiembre de 2017

Tengo





veo trozos de los edificios cayendo,
la tierra se cuartea,
llega la tormenta,
 los cuadros caen,
las fotos se despegan de los muros
y las ventanas se rompen,
la casa se inunda.


pero quisiera borrar eso,
y empezar el texto,
con una palaba:

Tengo
.


me gusta empezar algunos textos con la palabra,
tengo.


he tratado de repetirlo,
para sentir la fortuna sobre mi.

y porque la vida es así,
suele arrebatar lo más íntimo,
lo más permanente,
lo imperecedero,
y suele llegar el invierno,
con el olor de los muertos,
con las lunas de octubre,
con el presagio,
que debimos guardar en las cavas,
 un par extra de todo.


porque la vida es así


y vendrán más muertos
y carencias,
y vendrán más lluvias 
más terremotos,
tormentas.



pero también viene el día, 
después de la tormenta y su ojo,
después de los daños,
y las torres en el suelo,
y después del invierno,
y la reconstrucción de cielos,
de deshacerse de escombros,
levantarse,
sacudirse impávido la solapa,
andar, 
con un par de ladrillos,
de palas,
de manos extra,
de ojos que cuidan las espaldas.

la labor, 
explosiva de la destrucción,
puede ser obra de un hombre solo,
pero la reconstructiva,
de los lazos,
de los brazos,
las miradas,
el aliento,
no es de uno solo,
o una sola.


por eso he regresado a casa,
con la ciudad en llamas,
con los brazos quemados,
igual la frente,
que pese a mi andar cabizbajo,
ha mantenido la frente muy alto.


he regresado a casa,
con tus brazos en flores,
con gripa,
con pan,
y tu,
con sopa para curarme.

sé que el mundo se cae,
pero me gusta empezar un texto con la palabra tengo.

y por éste día te tengo,
y necesito poco más.













jueves, 7 de septiembre de 2017

kamikaze, el viento divino




algunos días,
de esos, 
los difíciles,
los días en que el trabajo cansa de más
y el esfuerzo se ve de menos,
me asomo al cielo
y observo aviones de papel.


esos días,
en que llevar verdades a la mesa,
exponer ésta tierra de flaquezas,
fotografiar a la muerte en la esquina,
ver de cerca la vida,
sentir pasos,
me asomo al cielo y pienso en esos pilotos,
fugaces.

siempre he admirado a los kamikazes,
ese afán suicida,
de no doblarse a la muerte
aventarse de frente,
sin otra espectativa,
que ganarse,
ese pedacito de universo que decidieron colgarse,
como insignia.

el fin de su búsqueda,
puede ser estúpida,
como el fin de la búsqueda de cualquier otro,
pero su disciplina,
la lealtad al propio honor,
contra todo instinto,
y lanzarse,
kamikaze por el aire.


quizá aún zurcan el cielo
.


hay días de esos,
los difíciles,
en los que pensar que actuar de ésta forma,
antiética,
es una garantía,
 suicida,
irreductible.


bien pienso,
que no es por uno,
es por dos
o tres
que amo,
que vale la pena ver el alba,
darles un sitio lindo para habitar.







martes, 5 de septiembre de 2017

casa



aprendimos a contar el tiempo,
 bajo las lunas y las tormentas,
la hora en que preparas la comida, 
cuando regreso del trabajo.

hicimos de la cama un espacio de tregua,
en dónde hablar y ver películas,
en dónde abrazar,
y abrasarnos 
con las brasas de los brazos,
con los trozos de peleas,
colgar guantes,
amar.

un sitio de tregua,
donde contar los sueños
y pasar tormentas 
y lunas
y contarlas.

aprendimos los rituales,
despertar,
poner café,
desyunarlo con un cigarro,
despedirme con un beso al aire,
"be safe ok?"
i promess,
nos mandamos mensaje.

las mañanas son ciegas sin ti,
los días de lluvia te prometen en casa,
poco a poco se fueron poblando las paredes,
mis fotos,
tus colores,
los libros,
tu hermana,
Balam en la chimenea,
un construx,
otra mesa,
monedas en la ventana,
cajas de cigarros,
las cajas que decoraste,
hogar de greip,
nuestra gata.


las mañanas son ciegas sin ti.

y se han ido acumulando a la cuenta,
de lunas y de tormentas,
veo el mundo pasar,
entre la muerte y los muertos,
más lluvia,
más días,
más tardes y soles,
más tu y más yo en el cuarto,
y el mundo gira,
y en la casa solo pasa que atardece.

has cocinado la vida de forma exquisita, 
le has agregado ajo a mis gustos,
casi herméticos,
le has puesto sal a mi vida,
y estoy aquí,
viéndote estudiar enfrente de mi.

has aprendido a amarme pacientemente,
yo cada vez me quedo más,
me voy menos,
necesito pococada vez y poco más de ti.


y le has puesto sal a mi vida.

bajo las tormentas descubriste el más grande de mis miedos,
y me abrazas,
con luna y las tormentas,
con los libros y los restos  
y las memorias y las cajas,
de greip y de cigarros.

las mañanas son ciegas sin ti 
y aquí estoy contigo,
esperando que calme el agua para volver  a casa.







domingo, 3 de septiembre de 2017

un voto please


si pueden entrar al link y darle un voto a la foto, lo agradecería :D



http://concurso.jarritos.com.mx/foto/0c416430-87b2-11e7-9887-03281b9309be

 con el tiempo la vida no se vuelve de uno, uno se devuelve a la vida a dar un poco de lo que recibe, y en ese afán de gratitud, uno se hace...