sábado, 1 de junio de 2019

a la distancia




me da miedo no ser yo quien cuide tus pasos,
ser quien te enseñe a caminar,
me dan miedo la distancia y el tiempo,
yo un cosmonauta,
perdido en el espacio,
perdido en mi forma peculiar de no saberme comunicar.


me da miedo perder éstos pensamientos, 
de cómo te explicaré la distancia,
sin entender yo mismo el porqué.


me aterra perderte,
más de lo que ya me estoy perdiendo,
más de lo que ya estoy perdido.

nos estoy construyendo una casa,
en mi mente ya tienes un cuarto lindo,
 por si decides venir.

estoy concretando pendientes,
escribo todas las noches la tesis,
estoy concretando presentes,
metí papeles a una beca,
 para tomar fotos de calle,
para un diplomado,
también daré un taller en tlaxcala,
tomaré un taller en unos días,
y te escribo poemitas en papel,
ya que no puedo tocar tu piel,
ver tus ojos,
abrazarte y reir.


sigo con mi serie de paisajes,
en la zona donde pretenden imponer la minera,
y destruir el mundo que para ti construyo,
si bien mis poemas y mis fotos no cambiarán al mundo,
son un punto de transgresión,
de inflexión,
de recreación,
y aunque no estás 
y casi nada tiene sentido,
lo que hago por ti que tiene sentido.

hoy desmonté tu cuna,
la desarmé lo más delicado que pude,
me había resistido a hacerlo,
era la esperanza de que volvieras,
y tuvieras en mis brazos,
un espacio donde crecer,
jugar.


en mi,
tienes un corazón para habitar,
todos los días que decidas

tomaré un taller en unos días,
invocando a la vida,
haré fotos de generación de una secundaria,
fotografiaré una boda,
daré otro taller solidario,
para entender y forjar identidad.

me había resistido a escribirte aquí,
para pensar que no te habías ido,
para negar el futuro negado,
de estar cada que te cayeras,
pero no, 
entiendo que no estaremos juntos,
la mayoría de esas veces,
y con todo lo que creo,
y las cosas que son mi creación,
eres la única que importa,
tu y tu hermano,
y por ti vale la pena luchar.

mis pensamientos verticales te adoran cada noche,
y pese a no creer en los dioses,
elevo la cabeza al cielo y te mando palabras.


cuando vi tu cara me enamoré de ti,
me enamoré de la vida,
he tenido muertes,
pérdidas inclementes,
he tenido dolores del alma,
tu partida ha sido la más dura,
de todas mis batallas,
no esperaba ésta venganza de dios.


te amo, te amaré,
si te llegan mis palabras en viento,
sonríe, 
desde mi impotencia te cuido.









No hay comentarios:

Publicar un comentario

recuento, Ojo de Viento

¿cómo hallar mi propia voz, el qué decir, la historia no contada? si traigo la existencia cancelada cómo hallar el mérito a mi palabra, si t...