martes, 2 de diciembre de 2014

Citando a Girondo

y por más empeño que ponga en concebirlo, 
no me es posible ni tan siquiera imaginar 
que pueda hacerse el amor más que volando.

Oliverio Girondo- no sé, me importa un pito.



soy triste y pedestre,
ella, fue etérea y volátil,
es curioso,
cuando hallas,
realmente hallas a la que vuela,
resulta que vuela más rápido que tu,
que el vuelo que uno tiene,
es vuelo mariposa
sigilosa,
sensación de alcanzar nubes,
cuando tocas la copa del árbol,
y vienes de ser pequeña oruga.


soy triste y pedestre,
ella, fue etérea y volátil,
y si, es terriblemente curioso,
cuando realmente hallas a la que vuela,

resulta que el propio aleteo,
es tan insignificante
a la magnitud del cielo,
un bello cielo ajeno,
tan ajeno ahora.

cuando montas su bella espalda,
y te abrazas al vientre,
hay un vértigo infinito,
que me contiene,
que me detuvo,
suspendido en el aire y más arriba
donde no hay aire
y solo se puede vivir respirando de su boca.


bueno,
 uno vuela,
 o cree que vuela,
pero si no has alcanzado la estratosfera
abrazado a su cintura,
no conoces
   nada

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 con el tiempo la vida no se vuelve de uno, uno se devuelve a la vida a dar un poco de lo que recibe, y en ese afán de gratitud, uno se hace...